domingo, 25 de septiembre de 2011

Mi cuerpo es tuyo

Me gusta la forma en la que me abres las piernas,
con ésa urgencia
violenta
rápida
suicida.

Moriré de un orgasmo entre tus brazos,
con el aliento agotado
y los brazos caidos.
Vil muñeca de trapo
raída
sucia
mascada
con tus huellas.

Toma de mí
hasta la última gota de saliva,
y muérdeme los pechos
buscando el consuelo
de mi generoso cuerpo.

Róbame todos los suspiros que tengo,
te entregaré gustosa
la clave de mis besos.
Pero no pidas
que te ame sin receso.
No me pidas lo eterno
en un cuerpo de efímero deseo.
Vivamos el apasionado ahora
de nuestros encuentros
e ignoremos el mañana
de la promesa de un amor eterno.

Tienes la finitud de mi piel servicial,
así que no me ruegues por un amor
que de eso yo ya no sé más.

sábado, 17 de septiembre de 2011

Anaïs...

" -Al fin y al cabo, si alguna explicación hay del misterio es ésta: el amor entre mujeres es un refugio y un escape hacia la armonía. En el amor entre hombre y mujer hay resistencia y conflicto, dos mujeres no se juzgan mutuamente, no se embrutecen mutuamente, no buscan nada que ridiculizar. Se rinden al sentimentalismo, a la comprensión mutua, al romanticismo. Ese amor es la muerte, lo admito. "

Anaïs Nin

viernes, 16 de septiembre de 2011

No me pidas

No me pidas demasiado,
no me pidas estrellas,
el cielo,
el sol...

No me pidas
la infinita entrega del amor.

Caricias,
besos,
sexo,
mi cuerpo es una bandeja
llena de delicias,
toma lo que quieras.

Pero no me pidas
lo que no está
en el menú.

No te enojes
si se me olvida
acariciarte o
dedicarte palabras dulces...

Toma de mi cuerpo lo que quieras,
engúlleme,
pero no me muerdas
el corazón.

No me pidas
un amor
que me niego
a germinar.

viernes, 9 de septiembre de 2011

Que difícil es ser

A veces me come la angustia
de ser.

Te escucho esa rabia,
asco,
pena,
urgencia,
y temo.

Solo quisiera
que los años pasaran rapidísimos,
y en esa carrera
no tener que escuchar
reproches y preguntas malintencionadas.

Que más me gustaría
que poder ser,
sin temer
tu mirada severa.

Quiero gritarte
que todo lo que crees
es verdad.
Pero me dolería
ver tu rostro manchado
de vergüenza y asco.

Quiero
no ser
y dejar de
querer.

domingo, 4 de septiembre de 2011

9.28 PM

Cuando los días son lentos,
con ése afán intenso de
remecer las marejadas del mar
color azúl oscuro
de mi memoria,
pienso en ti.

con un vaivén delirante,
de no saber si estoy en el presente
o en el pasado brumoso de tus brazos.

Quiero creer que el día se adelantará,
para que mañana
tu nombre se haya vuelto un susurro
que mis oídos interpretaron
como una brisa .

Ahora,
en el ahora contable
del presente en el reloj,
sé lo más persistente que quieras.
Ronda por mis venas todo lo que quieras,
desenreda las telarañas que tejí para esconderte,
grita los llantos que yo pretendí ignorar y desmerecer,
sé lo más cariñosa que puedas,
muérdeme con toda la fuerza que yo te controlé,
aprovéchate de la debilidad de este momento
y
deja los estragos más terribles en mi alma.

Mañana no sé si te recuerde,
pero ahora...
Ahora,
estás tan presente que podría tocarte.

¿Sientes mi mano?



¿Sientes esta temblorosa ansiedad que me mantiene reviviéndote?