domingo, 25 de septiembre de 2011

Mi cuerpo es tuyo

Me gusta la forma en la que me abres las piernas,
con ésa urgencia
violenta
rápida
suicida.

Moriré de un orgasmo entre tus brazos,
con el aliento agotado
y los brazos caidos.
Vil muñeca de trapo
raída
sucia
mascada
con tus huellas.

Toma de mí
hasta la última gota de saliva,
y muérdeme los pechos
buscando el consuelo
de mi generoso cuerpo.

Róbame todos los suspiros que tengo,
te entregaré gustosa
la clave de mis besos.
Pero no pidas
que te ame sin receso.
No me pidas lo eterno
en un cuerpo de efímero deseo.
Vivamos el apasionado ahora
de nuestros encuentros
e ignoremos el mañana
de la promesa de un amor eterno.

Tienes la finitud de mi piel servicial,
así que no me ruegues por un amor
que de eso yo ya no sé más.

No hay comentarios: