Realmente,
espero que te equivoques.
Espero que la ciudad,
oscura y peligrosa,
no me aceche con sus garras de hierro,
para así no recordarte.
Espero que el cielo
no derrame más plegarias
mojadas, estruendosas, agudas,
en los meses de invierno.
Para que no me llores,
para que me destierres de adentro.
Ansiosa,
espero que las cartas se vuelvan arena,
que se deslice en mis dedos,
que vuelvan al mar del olvido.
Y que el mundo onírico
no me absorba de manera tan violenta,
para que al despertar
no crea que te veré en unas horas.
Espero que nunca más
mis ojos se vuelvan fieros,
para que nadie más conozca
el dolor que sentiste al verlos.
Y aunque quizás no me vuelva a apasionar,
tendré la certeza que no podré dañar.
desenfundaré mis dedos de los guantes de hierro,
aprenderé a acariciar la piel
que a ti nunca te toqué.
Deseo, desde el fondo de mi alma,
torturada por tu dolor,
que te equivoques.
Que el invierno ya no sea congoja,
que mis manos se calienten de estío,
y que definitivamente,
exista alguien que me ame más que tú.
2 comentarios:
Ese recelo lo comparto, quién sabe, puede que se lo estén pasando bien juntas en estos mismos momentos. Sé dos cosas, la primera es que tu no eres una persona cualquiera, si existe una persona que no es cualquiera esa precisamente eres tu.
La segunda cosa que sé, es que todas las personas dejan huella, y si solo escribiendo trasmites lo que trasmites, no me quiero imaginar en persona.
Sólo sé que esa persona perdió algo más que a ti, se perdió a si misma.
Ahora seguramente no lo valora, pero con el tiempo ya se lo encontrará.
N.
P.D: Pensé en escribirte o compartir algo que hice en su época, pero sabes que pasa Nataly? las musas están para adorarlas y para soñarlas, si nos compartimos perderás la magia de aquel entonces.
Dejáme disfrutarte en el anónimato, te siento más mía.
Tendré q conformarme con tu admiración. Bienvenida a mis letras, me encanta q no te sean indiferentes, q las comprendas.
Eso te hace especial a ti.
Besos srta anónima.
=)
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